Seis Años de Lucha Feminista en el Desierto Más Árido

En entrevista con Radio HumedaLES, Andrea Rojas dio cuenta de su lucha en la red feminista Chañaral, un colectivo de mujeres que nace en el desierto mas radio del mundo y resiste en una zona de sacrificio ambiental ya hace 6 años.

Nacimos el 2019 tras la detención de Hugo Pasten, femicida de las mujeres desaparecidas en Copiapó. Desde ese momento denunciamos que las desapariciones de las mujeres no son casos aislados y responden a diferentes características del territorio. Por lo que levantamos la consigna que Atacama no es territorio seguro para las mujeres y niñas. Pero también con la firme convicción de que la autodefensa a este sistema patriarcal es la organización.

A 6 años lamentablemente, aun no hay justicia y las mujeres, las adolescentes sobre todo siguen desapareciendo. Nosotras ya hablamos de trata de mujeres y creemos que nuestra existencia es un acto de memoria.

La forma en la que nos levantamos ante el abandono del estado también, declarando zona de sacrificio a Chañaral por los relaves mineros que fueron arrojados por décadas por Codelco a través del rio salado, y que no solo mató toda vida en nuestra bahía, sino que también enferma y mata a quienes habitamos aquí.

Merecemos unas mejores condiciones de vida, reparación y justicia ambiental que no va a ser posible sin justicia de género. Ponemos en valor el rol de la crianza y cuidados. Son las mujeres quienes crían, educan a personas con condición del espectro autista, déficit cognitivo y enfermos crónicos.

La negación sistemática de esta realidad la usamos para hablar de crisis climática. Resistimos dos aluviones producto de las intensas lluvias acá en el norte y relevamos el rol de las mujeres en la organización territorial, como sostenedora de la vida. Un ejemplo de ello es el nacimiento del humedal. La desembocadura del rio salado donde se produjo un socavón casi como un acto de resiliencia de la naturaleza, formó un ecosistema donde ha crecido vegetación y nos visitan diferentes especies que hoy defendemos también.

Nos declaramos ecofeministas interseccionales, entendemos que nos atraviesan otras desigualdades que se entrelazan con esta lucha y nos hemos posicionado políticamente por el futuro de nuestro país, asumiéndonos por ejemplo como antifascistas. Luchamos contra la negación, invisibilización, el silencio cómplice denunciando e incomodando en las estructuras del poder desde todos lo espacios y formas de protesta que hemos encontrado

Hemos tejido redes desde lo local a lo nacional, somos tarde del tejido feminista de atacama y también de la Red Chilena contra la Violencia a las mujeres. No ha sido fácil la tarea q nos hemos impuesto, no ha estado ausente de violencia, pero entendiendo esta lógica capitalista colonial y las formas en que esta cultura extractivista actúa y permea tanto en lo público y en lo privado para la subordinación e las mujeres en la sociedad. Nuestras ganas de reconocimiento de este mensaje a otras partes son con el profundo deseo de que nunca más en ningún territorio, en nombre del progreso se sacrifiquen vidas como se ha hecho en Chañaral.